Los radiadores a la vista no suelen ayudar a la hora de decorar nuestro hogar. Son más bien un impedimento más que se une a otros que podamos tener para lograr la casa de nuestros sueños. Además de ocupar espacio, los radiadores no suelen ser especialmente bonitos. Como de todas formas no se pueden evitar, más vale que hagamos las paces con ellos dándoles mucho estilo. ¿Preparados para nuestra selección de radiadores pintados?
Radiadores pintados del color de la pared
Los más discretos preferirán disimular los radiadores para que se vean lo menos posible. Hay cubre radiadores ideados para taparlos, pero es importante tener en cuenta que comprometen su eficiencia energética. Cualquier cubierta que se interponga entre el radiador y el aire de la habitación está conteniendo el calor, aunque tenga perforaciones. Por eso, la mejor alternativa para decorar sin retener el calor es utilizar una pintura adecuada para radiadores.
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Mientras que para pintar tuberías de metal solo necesitarás pintura apta para metales, para pintar radiadores hay que tener en cuenta también las altas temperaturas. Comprueba siempre las instrucciones del fabricante para asegurarte de que la pintura resistirá. ¡Y luego a elegir los colores que te gusten!
Si quieres que tus radiadores tengan exactamente el mismo color que la pared, la pintura Farrow and Ball está disponible en una gama de 132 colores para distintas superficies, metal, madera, paredes y radiadores incluidos. ¿Te gusta el tono de la imagen? Se trata del color De Nimes de Farrow and Ball.
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El hecho de que el radiador esté disimulado con el mismo color de fondo de la pared no significa que la decoración tenga que ser discreta. La siguiente imagen nos encanta porque integra perfectamente el radiador pintado de azul turquesa con el estilo alegre y colorido de la casa.
Radiadores pintados para contrastar
Otra alternativa para pintar los radiadores es hacerlo de una tonalidad distinta a la de las paredes, creando contraste. Este radiador pintado de azul frente a las paredes blancas del baño está claro que no pasa desapercibido, pero ¿por qué habría de hacerlo?
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No porque pintes tus radiadores de un color distinto al de la pared tienen que destacar mucho. En este caso han pintado el radiador en el mismo tono de rosa que la puerta, por lo que coordina a la perfección. No tan atrevido como alguna de las otras opciones, pero sin duda un buen resultado.
Los contrastes pueden funcionar también en decoraciones más clásicas, sobre todo si incluimos el negro en la combinación. Aquí se ha pintado a juego con el zócalo y la puerta y se ha colocado un cuadro justo encima. De esta manera, el radiador pasa a formar parte de la decoración y queda perfectamente integrado.
Si buscas más atrevimiento aún, ¿por qué no pintar tus radiadores a mano con un diseño único? Hay que tener habilidad con el pincel y no es apto para todos los espacios, pero bien hecho puede quedar espectacular. Aquí lo vemos en una habitación infantil y nos encanta el resultado.
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¿Cómo puedo pintar un radiador en casa?
Nos gusta la opción de poder personalizar cualquier aspecto de nuestra casa, y los radiadores no van a ser menos. Si eliges pintar tu radiador porque la pintura antigua está estropeada, ten en cuenta que la superficie debe estar tan limpia y lisa como sea posible.
Para comenzar, si lo que quieres es repintar, lija el radiador suavemente para que se desprenda la pintura antigua. Después límpialo muy bien antes de proceder a aplicar la nueva pintura. Es imprescindible que elijamos una pintura adecuada para la tarea y que resista las elevadas temperaturas que alcanzará el radiador encendido. ¡No podemos usar cualquier pintura!
Recuerda ventilar bien mientras estás pintando y darle tiempo suficiente para que se seque bien antes de encenderlo. La mejor época para hacerlo es la primavera cuando ya hemos dejado de encenderlos hasta el invierno. Como siempre, lee bien las instrucciones del fabricante antes de pintar tus radiadores para hacerlo con total seguridad.
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Si ves la tarea muy complicada, tenemos rodillos y brochas especiales que te facilitan llegar a todos los rincones, para poder pintarlos incluso sin desmontarlos de la pared. Está en nuestras manos coger un elemento inevitable en nuestro hogar, como pueden ser los radiadores, y usar pintura para disimularlos ¡o destacarlos!
¿Tienes radiadores en tu casa? ¿Qué te parecen estos radiadores pintados?
